Explicación, estudio y comentario bíblico de Juan 8:30-43 verso por verso
Mientras él decía estas cosas, muchos creyeron en él.
Por tanto, Jesús decía a los judíos que habían creído en él: — Si ustedes permanecen en mi palabra serán verdaderamente mis discípulos;
y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
Le respondieron: — Somos descendientes de Abraham y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: “Llegarán a ser libres”?
Jesús les respondió: — De cierto, de cierto les digo que todo aquel que practica el pecado es esclavo del pecado.
El esclavo no permanece en la casa para siempre; el Hijo sí queda para siempre.
Así que, si el Hijo los hace libres, serán verdaderamente libres.
Sé que son descendientes de Abraham; no obstante, procuran matarme porque mi palabra no tiene cabida en ustedes.
Yo hablo de lo que he visto estando con el Padre, y ustedes hacen lo que han oído de parte de su padre.
Respondieron y le dijeron: — Nuestro padre es Abraham. Jesús les dijo: — Puesto que son hijos de Abraham, hagan las obras de Abraham.
Pero ahora procuran matarme a mí, un hombre que les he hablado la verdad que oí de parte de Dios. ¡Esto no lo hizo Abraham!
Ustedes hacen las obras de su padre. Entonces le dijeron: — Nosotros no hemos nacido de inmoralidad sexual. Tenemos un solo padre, Dios.
Entonces Jesús les dijo: — Si Dios fuera el padre de ustedes, me amarían; porque yo he salido y he venido de Dios. Yo no he venido por mí mismo sino que él me envió.
¿Por qué no comprenden lo que digo? Porque no pueden oír mi palabra.