• Jueces 13:20

    Aconteció que mientras la llama subía del altar hacia el cielo, el ángel del SEÑOR subió en la llama del altar ante la vista de Manoa y de su mujer, quienes se postraron en tierra sobre sus rostros.

  • Jueces 13:21

    El ángel del SEÑOR no volvió a aparecer a Manoa ni a su mujer. Entonces Manoa se dio cuenta de que era el ángel del SEÑOR,

  • Jueces 13:22

    y Manoa dijo a su mujer: — ¡Ciertamente moriremos, porque hemos visto a Dios!

  • Jueces 13:23

    Pero su mujer le respondió: — Si el SEÑOR hubiera querido matarnos, no habría aceptado de nuestras manos el holocausto y la ofrenda. No nos habría mostrado todas estas cosas ni ahora nos habría anunciado esto.

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