Explicación, estudio y comentario bíblico de Jueces 19:6-15 verso por verso
Se sentaron los dos juntos, y comieron y bebieron. Entonces el padre de la joven dijo al hombre: — Quédate, por favor, a pasar la noche, y alégrese tu corazón.
El hombre se levantó para irse, pero su suegro le insistió, y se quedó otra vez a pasar la noche allí.
Al quinto día, se levantó muy de mañana para irse, y el padre de la joven le dijo: — Por favor, fortalécete; y esperen hasta que decline el día. Y comieron los dos.
Entonces se levantó el hombre para irse con su concubina y su criado. Pero su suegro, el padre de la joven, le dijo: — He aquí que el día se acaba y está anocheciendo. Por favor, pasen aquí la noche, porque el día ya ha declinado. Pasa aquí la noche y alégrese tu corazón. Mañana se levantarán temprano para su viaje, y te irás a tu morada.
Pero el hombre no quiso pasar la noche allí, sino que se levantó y partió.
Cuando estaban cerca de Jebús, el día había declinado mucho. Entonces el criado dijo a su señor: — Ven, vayamos a esta ciudad de los jebuseos y pasemos la noche en ella.
Su señor le respondió: — No iremos a ninguna ciudad de extranjeros en la que no hay hijos de Israel. Más bien, pasaremos hasta Gabaa. — Dijo además a su criado — :
Ven y acerquémonos a uno de esos lugares para pasar la noche en Gabaa o en Ramá.
Pasando de largo, caminaron; y el sol se puso cuando estaban junto a Gabaa, que pertenece a Benjamín.
Entonces allí se apartaron del camino para entrar y pasar la noche en Gabaa. Entraron y se sentaron en la plaza de la ciudad, porque no hubo quien los recibiera en su casa para pasar la noche.