Explicación, estudio y comentario bíblico de Jueces 8:1-9 verso por verso
Entonces los hombres de Efraín dijeron a Gedeón:
Y les respondió: — ¿Qué he hecho yo ahora comparado con ustedes? ¿No ha sido mejor el rebusco de Efraín que la vendimia de Abiezer?
Dios ha entregado en la mano de ustedes a Oreb y a Zeeb, jefes de Madián. ¿Qué pude yo hacer comparado con ustedes? Después que él dijo estas palabras, se aplacó el enojo de ellos contra él.
Gedeón llegó para cruzar el Jordán, él y los trescientos hombres que traía consigo, cansados, pero todavía persiguiendo.
Y dijo a los hombres de Sucot: — Den, por favor, tortas de pan a la gente que me acompaña, porque ellos están cansados. Yo estoy persiguiendo a Zébaj y a Zalmuna, reyes de Madián.
Los jefes de Sucot le respondieron: — ¿Están ya las manos de Zébaj y de Zalmuna en tu mano, para que demos pan a tu ejército?
Y Gedeón les dijo: — Pues bien, cuando el SEÑOR haya entregado en mi mano a Zébaj y a Zalmuna, azotaré su carne con espinas y cardos del desierto.
De allí subió a Peniel y les dijo las mismas palabras. Pero los de Peniel le respondieron como le habían respondido los de Sucot.
Y él habló también a los de Peniel, diciendo: — Cuando yo regrese en paz, derribaré esta torre.