-
A las mujeres violaron en Sion, y a las vírgenes en las ciudades de Judá.
-
Los príncipes fueron colgados de sus manos; no fue respetada la persona de los ancianos.
-
Los jóvenes cargaron piedras de molino; los muchachos desfallecieron bajo la carga de la leña.
-
Los ancianos han dejado de acudir a las puertas de la ciudad; los jóvenes han dejado sus canciones.
-
Ha cesado el regocijo de nuestro corazón; nuestra danza se ha convertido en duelo.
-
Cayó la corona de nuestra cabeza. ¡Ay de nosotros, porque hemos pecado!
-
Por esto está enfermo nuestro corazón; por esto se han ensombrecido nuestros ojos.
-
Por el monte Sion, que ha quedado desolado, se pasean las zorras.
Continúa después de la publicidad