Explicación, estudio y comentario bíblico de Levítico 13:1-12 verso por verso
El SEÑOR habló a Moisés y a Aarón diciendo:
“Cuando alguien tenga en la piel de su cuerpo hinchazón, costra o mancha clara y se convierta en la piel de su cuerpo en llaga de lepra, será traído al sacerdote Aarón o a uno de sus hijos sacerdotes.
El sacerdote examinará la parte afectada en la piel del cuerpo. Si el pelo en la llaga se ha vuelto blanco y la llaga parece más hundida que la piel de su cuerpo, es llaga de lepra. Cuando el sacerdote lo haya examinado, lo declarará impuro.
“Si en la piel de su cuerpo hay una mancha clara blanquecina, pero no parece más hundida que la piel ni su pelo se ha vuelto blanco, el sacerdote aislará al enfermo durante siete días.
Al séptimo día el sacerdote lo examinará. Si según su parecer la llaga se ha mantenido igual y no se ha extendido en la piel, el sacerdote lo volverá a aislar durante otros siete días.
Al séptimo día lo examinará de nuevo. Y he aquí que si la llaga aparece descolorida y no se ha extendido, el sacerdote lo declarará puro; solo era una erupción. El enfermo lavará su ropa y quedará puro.
“Pero si la erupción se ha extendido notablemente por la piel, después que él se haya mostrado al sacerdote para su purificación, se presentará otra vez ante el sacerdote.
El sacerdote lo examinará, y he aquí que si la erupción se ha extendido en la piel, él lo declarará impuro; es lepra.
“Cuando alguien tenga llaga de lepra, será traído al sacerdote.
Él lo examinará; y he aquí que si aparece una hinchazón blanca en la piel que ha hecho que el pelo se vuelva blanco y ha hecho aparecer la carne viva,
es lepra crónica en la piel de su cuerpo. El sacerdote lo declarará impuro; no lo aislará, porque ya es impuro.
“Pero si la lepra brota intensamente en la piel y cubre toda la piel del cuerpo del enfermo, desde su cabeza hasta sus pies, hasta donde los ojos del sacerdote puedan ver,