Explicación, estudio y comentario bíblico de Levítico 23:16-24 verso por verso
Contarán cincuenta días hasta la mañana siguiente al séptimo sábado. Entonces presentarán una ofrenda vegetal nueva al SEÑOR.
Desde los lugares donde habiten traerán dos panes para ofrenda mecida, que serán de cuatro kilos de harina fina, cocidos con levadura, como primicias al SEÑOR.
Ofrecerán con el pan siete corderos de un año, sin defecto, un novillo y dos carneros. Serán el holocausto al SEÑOR, junto con sus ofrendas vegetales y sus ofrendas de líquidos. Esta es una ofrenda quemada de grato olor al SEÑOR.
Ofrecerán además un macho cabrío como sacrificio por el pecado y dos corderos de un año como sacrificio de paz.
El sacerdote los presentará como ofrenda mecida delante del SEÑOR. Junto con el pan de las primicias, los dos corderos serán cosa sagrada al SEÑOR, para el sacerdote.
En este mismo día convocarán una asamblea sagrada; no harán ningún trabajo laboral. Este es un estatuto perpetuo a través de sus generaciones, dondequiera que habiten.
“‘Y cuando sieguen la mies de su tierra, no segarás hasta el último rincón de tu campo ni recogerás las espigas en tu campo segado. Las dejarás para el pobre y el extranjero. Yo, el SEÑOR, su Dios’”.
El SEÑOR habló a Moisés diciendo:
“Habla a los hijos de Israel y diles: ‘El primer día del mes séptimo tendrán una fiesta sabática, una conmemoración con estrépito de trompetas y una asamblea sagrada.