Explicación, estudio y comentario bíblico de Levítico 27:21-28 verso por verso
Cuando pase el jubileo, el campo será consagrado al SEÑOR como campo confiscado; será para el sacerdote como posesión suya.
“Si alguien consagra al SEÑOR un campo que ha comprado y que no era campo de su posesión,
entonces el sacerdote calculará con él la suma de tu valoración hasta el año del jubileo. Aquel día él pagará el precio que tú hayas señalado como cosa consagrada al SEÑOR.
El año del jubileo ese campo volverá a aquel de quien él lo compró, a quien pertenece la posesión de la tierra.
Todo lo valorarás de acuerdo con la moneda del santuario. (Once gramos de plata).
“Nadie consagrará el primogénito de los animales, ya que por ser primogénito pertenece al SEÑOR. Sea ternero o cordero, es del SEÑOR.
Pero si es animal inmundo, lo rescatarán conforme a tu valoración y añadirán a su valor una quinta parte. Si no lo rescatan, se venderá conforme a tu valoración.
“No se venderá ni se rescatará ninguna cosa que alguien haya dedicado por completo al SEÑOR, de todo lo que posee, trátese de personas, de animales o de los campos de su posesión. Todo lo dedicado por completo será cosa muy sagrada al SEÑOR.