Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 1:26-37 verso por verso
En el sexto mes, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret,
a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David. El nombre de la virgen era María.
Cuando entró a donde ella estaba, dijo: — ¡Te saludo, muy favorecida! El Señor está contigo.
Pero ella se turbó por sus palabras y se preguntaba qué clase de salutación sería esta.
Entonces el ángel le dijo: — ¡No temas, María, porque has hallado gracia ante Dios!
He aquí concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús.
Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de su padre David.
Reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y de su reino no habrá fin.
Entonces María dijo al ángel: — ¿Cómo será esto? Porque yo no conozco varón.
Respondió el ángel y le dijo: — El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el santo Ser que nacerá será llamado Hijo de Dios.
He aquí, también tu parienta Elisabet ha concebido un hijo en su vejez. Este es el sexto mes para ella que era llamada estéril.
Porque ninguna cosa será imposible para Dios.