Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 10:32-34 verso por verso
De igual manera, un levita también llegó al lugar y, al ir y verle, pasó de largo.
Pero cierto samaritano, que iba de viaje, llegó cerca de él y, al verle, fue movido a misericordia.
Acercándose a él, vendó sus heridas echándoles aceite y vino. Y poniéndolo sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un mesón y cuidó de él.