Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 17:1-4 verso por verso
Dijo a sus discípulos: — Es imposible que no vengan tropiezos; pero, ¡ay de aquel que los ocasione!
Mejor le fuera que se le atara una piedra de molino al cuello y que fuera lanzado al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeñitos.
»Miren por ustedes mismos: Si tu hermano peca, repréndele; y si se arrepiente, perdónale.
Si siete veces al día peca contra ti, y siete veces al día vuelve a ti diciendo: “Me arrepiento”, perdónale.