Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 2:28-32 verso por verso
Simeón lo tomó en sus brazos y bendijo a Dios diciendo:
— Ahora, Soberano Señor, despide a tu siervo en paz conforme a tu palabra;
porque mis ojos han visto tu salvación
que has preparado en presencia de todos los pueblos:
luz para revelación de las naciones y gloria de tu pueblo Israel.