Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 23:5-18 verso por verso
Pero ellos insistían diciendo: — Alborota al pueblo enseñando por toda Judea, comenzando desde Galilea hasta aquí.
Entonces Pilato, al oírlo, preguntó si el hombre era galileo.
Y al saber que era de la jurisdicción de Herodes lo remitió a Herodes, quien también estaba en Jerusalén en aquellos días.
Herodes, viendo a Jesús, se alegró mucho porque hacía mucho tiempo que deseaba verle, pues había oído muchas cosas de él y tenía esperanzas de que lo vería hacer algún milagro.
Herodes le preguntaba con muchas palabras, pero Jesús no le respondió nada.
Estaban allí los principales sacerdotes y los escribas, acusándolo con vehemencia.
Pero Herodes y su corte, después de menospreciarlo y burlarse de él, lo vistieron con ropa espléndida. Y volvió a enviarlo a Pilato.
Aquel mismo día se hicieron amigos Pilato y Herodes porque antes habían estado enemistados.
Entonces Pilato convocó a los principales sacerdotes, a los magistrados y al pueblo,
y les dijo: — Me han presentado a este como persona que desvía al pueblo. He aquí, yo lo he interrogado delante de ustedes y no he hallado ningún delito en este hombre de todo aquello que lo acusan.
Tampoco Herodes, porque él nos lo remitió; y he aquí no ha hecho ninguna cosa digna de muerte.
Así que lo soltaré después de castigarle.
Pero toda la multitud dio voces a una, diciendo: — ¡Fuera con este! ¡Suéltanos a Barrabás!