Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 24:24-34 verso por verso
Algunos de los nuestros fueron al sepulcro y hallaron como las mujeres habían dicho, pero a él no lo vieron.
Entonces él les dijo: — ¡Oh insensatos y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho!
¿No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas y que entrara en su gloria?
Y comenzando desde Moisés y todos los Profetas, les interpretaba en todas las Escrituras lo que decían de él.
Así llegaron a la aldea a donde iban, y él hizo como que iba más adelante.
Pero ellos le insistieron diciendo: — Quédate con nosotros, porque es tarde y el día ya ha declinado. Entró, pues, para quedarse con ellos.
Y sucedió que, estando sentado con ellos a la mesa, tomó el pan, lo bendijo y les dio.
Entonces fueron abiertos los ojos de ellos y lo reconocieron. Pero él desapareció de su vista.
Y se decían el uno al otro: — ¿No ardía nuestro corazón en nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos abría las Escrituras?
En la misma hora se levantaron y se volvieron a Jerusalén. Hallaron reunidos a los once y a los que estaban con ellos,
quienes decían: — ¡Verdaderamente el Señor ha resucitado y ha aparecido a Simón!