Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 24:31-33 verso por verso
Entonces fueron abiertos los ojos de ellos y lo reconocieron. Pero él desapareció de su vista.
Y se decían el uno al otro: — ¿No ardía nuestro corazón en nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos abría las Escrituras?
En la misma hora se levantaron y se volvieron a Jerusalén. Hallaron reunidos a los once y a los que estaban con ellos,