Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 3:24-38 verso por verso
hijo de Elí, hijo de Matat, hijo de Leví, hijo de Melqui, hijo de Jana, hijo de José,
hijo de Matatías, hijo de Amós, hijo de Nahúm, hijo de Esli,
hijo de Nagai, hijo de Maat, hijo de Matatías, hijo de Semei, hijo de José, hijo de Judá,
hijo de Joanán, hijo de Resa, hijo de Zorobabel, hijo de Salatiel,
hijo de Neri, hijo de Melqui, hijo de Adi, hijo de Cosam, hijo de Elmodam, hijo de Er,
hijo de Josué, hijo de Eliezer, hijo de Jorim, hijo de Matat,
hijo de Leví, hijo de Simeón, hijo de Judá, hijo de José, hijo de Jonán, hijo de Eliaquim,
hijo de Melea, hijo de Mainán, hijo de Matata, hijo de Natán,
hijo de David, hijo de Isaí, hijo de Obed, hijo de Boaz, hijo de Salá, hijo de Najsón,
hijo de Aminadab, hijo de Admín, hijo de Arní, hijo de Hesrón, hijo de Fares, hijo de Judá,
hijo de Jacob, hijo de Isaac, hijo de Abraham, hijo de Taré,
hijo de Nacor, hijo de Serug, hijo de Ragau, hijo de Peleg, hijo de Heber, hijo de Sélaj,
hijo de Cainán, hijo de Arfaxad, hijo de Sem, hijo de Noé,
hijo de Lamec, hijo de Matusalén, hijo de Enoc, hijo de Jared, hijo de Mahalaleel, hijo de Cainán,
hijo de Enós, hijo de Set, hijo de Adán, hijo de Dios.