Explicación, estudio y comentario bíblico de Lucas 6:36-42 verso por verso
Sean misericordiosos, como también su Padre es misericordioso.
“No juzguen, y no serán juzgados. No condenen, y no serán condenados. Perdonen, y serán perdonados.
Den, y se les dará; medida buena, apretada, sacudida y rebosante se les dará en su regazo. Porque con la medida con que miden se les volverá a medir”.
Entonces les dijo una parábola: “¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en el hoyo?
El discípulo no es superior a su maestro, pero cualquiera que es plenamente instruido será como su maestro.
¿Por qué miras la brizna de paja que está en el ojo de tu hermano pero dejas de ver la viga que está en tu propio ojo?
¿Cómo puedes decir a tu hermano: ‘Hermano, deja que yo saque la brizna de tu ojo’, sin que mires la viga que está en tu ojo? ¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu ojo, y entonces verás bien para sacar la brizna que está en el ojo de tu hermano.