Explicación, estudio y comentario bíblico de Marco 6:21-29 verso por verso
Llegó un día oportuno cuando Herodes, en la fiesta de su cumpleaños, dio una cena para sus altos oficiales, los tribunos y las personas principales de Galilea.
Entonces la hija de Herodía entró y danzó, y agradó a Herodes y a los que estaban con él a la mesa; y el rey le dijo a la muchacha: — Pídeme lo que quieras, y yo te lo daré.
Y le juró mucho: — Todo lo que me pidas te daré, hasta la mitad de mi reino.
Ella salió y dijo a su madre: — ¿Qué pediré? Y esta dijo: — La cabeza de Juan el Bautista.
En seguida ella entró con prisa al rey y le pidió diciendo: — Quiero que ahora mismo me des en un plato la cabeza de Juan el Bautista.
El rey se entristeció mucho pero, a causa del juramento y de los que estaban a la mesa, no quiso rechazarla.
Inmediatamente el rey envió a uno de la guardia y mandó que fuera traída la cabeza de Juan. Este fue, lo decapitó en la cárcel
y llevó su cabeza en un plato; la dio a la muchacha, y la muchacha se la dio a su madre.
Cuando sus discípulos oyeron esto, fueron y tomaron su cuerpo, y lo pusieron en un sepulcro.