Explicación, estudio y comentario bíblico de Mateo 12:22-29 verso por verso
Entonces fue traído a él un endemoniado, ciego y mudo; y lo sanó, de manera que el mudo hablaba y veía.
Toda la gente estaba atónita y decía: — ¿Acaso será este el Hijo de David?
Pero al oírlo, los fariseos dijeron: — Este no echa fuera los demonios sino por Beelzebul, el príncipe de los demonios.
Pero como Jesús conocía sus pensamientos, les dijo: — Todo reino dividido contra sí mismo está arruinado. Y ninguna ciudad o casa dividida contra sí misma permanecerá.
Y si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido. ¿Cómo, pues, permanecerá en pie su reino?
Y si yo echo fuera los demonios por Beelzebul, ¿por quién los echan fuera sus hijos? Por tanto, ellos serán sus jueces.
Pero si por el Espíritu de Dios yo echo fuera los demonios, ciertamente ha llegado a ustedes el reino de Dios.
Porque, ¿cómo puede alguien entrar en la casa de un hombre fuerte y saquear sus bienes a menos que primero ate al hombre fuerte? Y entonces saqueará su casa.