Explicación, estudio y comentario bíblico de Mateo 26:59-68 verso por verso
Los principales sacerdotes, los ancianos y todo el Sanedrín buscaban falso testimonio contra Jesús, para que le entregaran a muerte.
Pero no lo hallaron, a pesar de que se presentaron muchos testigos falsos. Por fin se presentaron dos
y dijeron: — Este dijo: “Puedo derribar el templo de Dios y edificarlo en tres días”.
Se levantó el sumo sacerdote y le dijo: — ¿No respondes nada? ¿Qué testifican estos contra ti?
Pero Jesús callaba. Y el sumo sacerdote le dijo: — ¡Te conjuro por el Dios viviente que nos digas si tú eres el Cristo, el Hijo de Dios!
Jesús le dijo: — Tú lo has dicho. Además les digo: De aquí en adelante verán al Hijo del Hombre sentado a la diestra del Poder y viniendo en las nubes del cielo.
Entonces el sumo sacerdote rasgó su vestidura diciendo: — ¡Ha blasfemado! ¿Qué más necesidad tenemos de testigos? He aquí, ahora mismo, ustedes han oído la blasfemia.
¿Qué les parece? Y ellos respondiendo dijeron: — ¡Es reo de muerte!
Entonces le escupieron en la cara y le dieron puñetazos, y otros le dieron bofetadas
diciendo: — ¡ Profetízanos, Cristo! ¿Quién es el que te golpeó?