Explicación, estudio y comentario bíblico de Mateo 27:45-50 verso por verso
Desde el medio día descendió oscuridad sobre toda la tierra hasta las tres de la tarde.
Como a las tres de la tarde Jesús exclamó a gran voz diciendo: — ¡Elí, Elí! ¿Lama sabactani?, (esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?).
Cuando algunos de los que estaban allí le oyeron, decían: — Este hombre llama a Elías.
Y de inmediato uno de ellos corrió, tomó una esponja, la llenó de vinagre y, poniéndola en una caña, le daba de beber.
Pero otros decían: — Deja, veamos si viene Elías a salvarlo.
Pero Jesús clamó otra vez a gran voz y entregó el espíritu.