Explicación, estudio y comentario bíblico de Números 32:2-14 verso por verso
Entonces los hijos de Gad y los hijos de Rubén fueron y hablaron a Moisés, al sacerdote Eleazar y a los dirigentes de la congregación, diciendo:
— Atarot, Dibón, Jazer, Nimra, Hesbón, Eleale, Sebam, Nebo y Beón,
tierras que el SEÑOR conquistó delante de la congregación de Israel, son tierras apropiadas para el ganado; y tus siervos tienen ganado.
Por eso — dijeron — , si hemos hallado gracia ante tus ojos, sea dada esta tierra a tus siervos como posesión; no nos hagas cruzar el Jordán.
Pero Moisés respondió a los hijos de Gad y a los hijos de Rubén; — ¿Irán sus hermanos a la guerra y ustedes se quedarán aquí?
¿Por qué desalientan a los hijos de Israel, de modo que no crucen a la tierra que les ha dado el SEÑOR?
Así hicieron sus padres cuando los envié desde Cades-barnea para que reconocieran la tierra.
Fueron hasta el arroyo de Escol, y después que reconocieron la tierra desalentaron a los hijos de Israel para que no entraran en la tierra que el SEÑOR les había dado.
Entonces se encendió el furor del SEÑOR, y juró diciendo:
“Los hombres que vinieron de Egipto, desde los veinte años para arriba, no verán la tierra de la cual juré a Abraham, a Isaac y a Jacob, porque no me siguieron con integridad;
excepto Caleb hijo de Jefone el quenezeo y Josué hijo de Nun, quienes con integridad han seguido al SEÑOR”.
El furor del SEÑOR se encendió contra Israel, y los hizo andar errantes cuarenta años por el desierto, hasta que pasó toda aquella generación que había hecho lo malo ante los ojos del SEÑOR.
Y he aquí, ustedes han sucedido a sus padres, prole de hombres pecadores, para añadir más al ardor de la ira del SEÑOR contra Israel.