Explicación, estudio y comentario bíblico de Oseas 5:8-28 verso por verso
“¡Toquen la corneta en Gabaa, la trompeta en Ramá! Griten en Bet-avén: ‘¡Tiembla, oh Benjamín!’.
Efraín será una desolación en el día del castigo. En las tribus de Israel hago conocer lo que es verdadero.
Los gobernantes de Judá fueron como los que traspasan los linderos; derramaré mi ira sobre ellos como agua.
Efraín es oprimido y quebrantado en el juicio porque quiso andar en pos de las vanidades.
Yo, pues, seré para Efraín como polilla y como carcoma para la casa de Judá.
Efraín verá su enfermedad y Judá su llaga. Entonces Efraín irá a Asiria; enviará embajadores al gran rey. Pero él no los podrá sanar ni les curará la llaga.
Porque yo seré para Efraín como un león y como un cachorro de león para la casa de Judá: Yo mismo arrebataré y me iré; tomaré y no habrá quien libre.
Voy a volverme a mi lugar hasta que reconozcan su culpa y busquen mi rostro. Y en su angustia me buscarán con diligencia”.