-
Ve a la hormiga, oh perezoso; observa sus caminos y sé sabio.
-
Ella no tiene jefe ni comisario ni gobernador;
-
pero prepara su comida en el verano, y guarda su sustento en el tiempo de la siega.
-
Perezoso: ¿Hasta cuándo has de estar acostado? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño?
-
Un poco de dormir, un poco de dormitar y un poco de cruzar las manos para reposar.
-
Así vendrá tu pobreza como un vagabundo, y tu escasez como un hombre armado.
Continúa después de la publicidad