Explicación, estudio y comentario bíblico de Romanos 10:4-12 verso por verso
Porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree.
Moisés escribe de la justicia que es por la ley: El hombre que haga estas cosas vivirá por ellas.
Pero la justicia que es por la fe dice así: No digas en tu corazón, “¿Quién subirá al cielo?” (esto es, para hacer descender a Cristo)
ni “¿Quién descenderá al abismo?” (esto es, para hacer subir a Cristo de entre los muertos).
Más bien, ¿qué dice?: Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:
que si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y si crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo.
Porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se hace confesión para salvación.
Porque la Escritura dice: Todo aquel que cree en él no será avergonzado.
Porque no hay distinción entre judío y griego, pues el mismo que es Señor de todos es rico para con todos los que lo invocan.