Explicación, estudio y comentario bíblico de Romanos 15:25-33 verso por verso
Pero ahora voy a Jerusalén para ministrar a los santos.
Porque Macedonia y Acaya tuvieron a bien hacer una ofrenda para los pobres de entre los santos que están en Jerusalén.
Pues les pareció bien, y son deudores a ellos; porque si los gentiles han sido hechos participantes de sus bienes espirituales, ellos también deben servirles con sus bienes materiales.
Así que, cuando haya concluido esto y les haya entregado oficialmente este fruto, pasaré por ustedes a España.
Y sé que cuando vaya a ustedes llegaré con la abundancia de la bendición de Cristo.
Pero les ruego, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del Espíritu, que luchen conmigo en oración por mí delante de Dios
para que yo sea librado de los desobedientes que están en Judea, y que mi servicio a Jerusalén sea del agrado de los santos
para que, al llegar a ustedes con gozo por la voluntad de Dios, encuentre descanso junto con ustedes.
Y el Dios de paz sea con todos ustedes. Amén.