-
Salva con tu diestra y respóndenos de modo que sean librados tus amados.
-
Dios ha hablado en su santuario: “¡Cómo me regocijo! Repartiré a Siquem y mediré el valle de Sucot.
-
Mío es Galaad y mío es Manasés. Efraín es la fortaleza de mi cabeza; Judá es mi cetro.
-
Moab es la vasija en que me lavo; sobre Edom echaré mis sandalias, y sobre Filistea lanzaré mi grito de victoria”.
Continúa después de la publicidad