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¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿A dónde huiré de tu presencia?
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Si subo a los cielos, allí estás tú; si en el Seol hago mi cama, allí tú estás.
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Si tomo las alas del alba y habito en el extremo del mar,
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aun allí me guiará tu mano y me asirá tu diestra.
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