• Salmo 141:5

    Que el justo me castigue y me reprenda será un favor. Pero que el aceite del impío no embellezca mi cabeza, pues mi oración será continuamente contra sus maldades.

  • Salmo 141:6

    Sean derribados sus jueces en lugares peñascosos, y oigan mis palabras, que son agradables.

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