-
La boca del justo expresará sabiduría, y su lengua proferirá juicio.
-
La ley de su Dios está en su corazón; por eso sus pasos no vacilarán.
-
El impío acecha al justo y procura matarlo.
-
El SEÑOR no lo dejará caer en su mano ni dejará que lo condenen cuando sea juzgado.
Continúa después de la publicidad