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Porque no hay sinceridad en su boca; sus entrañas están llenas de destrucción. Su garganta es un sepulcro abierto, y con su lengua hablan lisonjas.
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Decláralos culpables, oh Dios; caigan por sus propios consejos. Échalos por la multitud de sus rebeliones, porque se rebelaron contra ti.
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