• Salmo 94:12

    Bienaventurado el hombre a quien tú, oh SEÑOR, disciplinas y lo instruyes sobre la base de tu ley

  • Salmo 94:13

    para darle tranquilidad en los días de la desgracia; en tanto que para los impíos se cava una fosa.

  • Salmo 94:14

    Porque el SEÑOR no abandonará a su pueblo ni desamparará a su heredad.

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