Lamentaciones 2:1-22
1 ¡Cómo ha cubierto de nubes el Señor, en su ira, a la hija de Sion!
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CAPITULO 2
(II ELEGÍA)
Vers. 1-22. Alef, א.
1. Cómo—El título de la compilación se repite aquí y en la Elegía 4:1. oscureció en su furor—esto es, con las tinieblas de la ignominia. derribó del cielo a la tierra—(Mateo 11:23). La lanzó desde la más alta prosperidad a la más abyecta miseria. la hermosura de Israel—su hermoso templo (Salmo 29:2; Salmo 74:7; Salmo 96:9; Isaías 60:7; Isaías 64:11). estrado de sus pies—el arca (véase 1 Crónicas 28:2, con el Salmo 99:5; Salmo 132:7). Antes se habían gloriado más en el arca que en Dios, del cual era símbolo; ahora comprenden que era sólo el “estrado” de sus pies, no obstante haber sido una gran gloria para ellos el que Dios se dignase usarla como tal. Beth, ב.
2. deslustró—entregándola en manos de un profano enemigo. Véase Salmo 89:39, “profanó … la corona”. Gimel, ג.
3. cuerno—llevado en el Oriente como ornamento sobre la frente y como emblema de autoridad y majestad (1 Samuel 2:10; Salmo 132:17; Jeremias 48:25, Nota). hizo volver atrás su diestra—(Salmo 74:11). Dios les retiró la ayuda que antes les había dado. No como Henderson: “Ha vuelto atrás la mano derecha (de Israel)” (Salmo 89:43). Daleth, ד.
4. (Isaías 63:10). afirmó su mano derecha—tomó posición para usar su diestra como adversario. Para Henderson se trata de la figura de un arquero que con mano firme apunta al blanco. No sólo le retiró su ayuda a Israel, sino que tomó armas contra él. toda cosa hermosa a la vista—(Ezequiel 24:25). Todo lo que era atrayente para la juventud: la belleza. el rango, etc. en la tienda—las casas de Jerusalén. He, ה.
5. como enemigo—(Jeremias 30:14). tristeza y lamento—En el original hay un juego de sonidos para realzar el efecto (Job 30:3, en el original hebreo; Ezequiel 35:3 margen de la Versión Inglesa). Vau, ו.
6. su tienda—más bien, “él ha quitado violentamente su Seto (el seto del lugar que era sagrado para él, Salmo 80:12; Salmo 89:40; Isaías 5:5) como el de un jardin” [Maurer]. Calvino confirma la Versión Inglesa: “Su tienda (esto es, su templo) como (uno que quitara la cabaña o choza) de un jardin”. Isaías 1:8 concuerda con esto (Job 27:18). el lugar de su congregación el templo y las sinagogas (Salmo 74:7). solemnidades—(cap. 1:4). Zain, ז.
7. Dieron grita en la casa de Jehová como en día de fiesta—El grito de triunfo del enemigo en el conquistado templo tenía cierta semejanza con las alegres acciones de gracias que solían ofrecerse en ese mismo lugar en nuestras “fiestas solemnes”; pero ¡qué triste contraste entre una y otra ocasión! (véase v. 22). Jeth, ח.
8. Extendió el cordel—Los hijos de oriente usaban cordel de medir no sólo para construir edificios, sino para destruirlos (2 Reyes 21:13; Isaías 34:11). Aquí se da a entender la inclemente rigidez con que los castigaría. Teth, ט.
9. Sus puertas no pueden impedir que entre el enemigo en la ciudad, porque se encuentran echadas por tierra entre los escombros. quebrantó sus cerrojos-(Jeremias 51:30). Su rey … entre las gentes—(Deuteronomio 28:36). no hay ley—(2 Crónicas 15:3). Las leyes civiles y religiosas eran unas mismas bajo la teocracia. “Todas las ordenanzas legales (proféticas, lo mismo que sacerdotales) de la teocracia, ya no existen” (Salmo 74:9; Ezequiel 7:26). Yod, י.
10. (Job 2:12). Los “ancianos”, con su ejemplo, inducirían a los otros a una inconsolable tristeza. Las vírgenes—quienes por lo general se muestran ansiosas de poner de relieve sus apariencias personales para sacar ventaja de ello. Caf, כ.
11. Mi hígado se derramó—esto es, como se suponía que el hígado era el asiento de las pasiones, todos mis sentimientos están derramados y humillados, etc. “El hígado” está puesto aquí por la bilis (véase Job 16:13, “la hiel”; Salmo 22:14), de la vesícula biliar, existente sobre el hígado, la cual se derram a copiosamente cuando las pasiones se agitan desfallecía—por efectos del hambre. Lamed, ל.
12. como heridos—El hambre era tan mortífera como la espada (Jeremias 52:6). Derramando sus almas en el regazo de sus madres—Instintivamente se vuelven a los senos maternos buscando leche, mas, no hallándola, entregan su vida, por decirlo así, “en el regazo de su madre”. Mem, מ.
13. ¿Qué testigo te traeré?—¿Qué puedo yo traerte como testigo o ejemplo para demostrar que otros han sufrido tan grandes males como tú? Yo no puedo consolarte con el consuelo con que frecuentemente son consolados los que están de duelo, diciéndote que tu suerte es como la de otros que sufren igual que tú. La “mar” ofrece el único emblema apropiado de tus infortunios, con su ilimitada extensión y profundidad (cap. 1:12; Daniel 9:12). Nun, נ.
14. Tus profetas—No los de Dios (Jeremias 23:26). vieron para ti vanidad—para satisfacer tu apetito, no en consideración a la verdad, sino a la falsedad. no descubrieron tu pecado—en oposición al mandamiento de Dios dado a sus verdaderos profetas (Isaías 58:1). Liter., ellos (los falsos profetas) no quitaron el velo que cubria tu iniquidad para ponerla delante de ti. vanas profecías—eran consoladoras y aduladoras, pero el resultado de ellas fueron las pesadas calamidades que le sucedieron al pueblo, peores aún que aquello con que las profecías de Jeremías, que ellos, por mofa, llamaban “cargas”, amenazaban. De ahí que él llame a sus pretendidas profecías “falsas cargas”, las que fueron para los judíos “la causa de su destierro” [Calvino]. Samej, ס.
15. batieron las manos—por mofa (Job 27:23; Job 34:37). movieron sus cabezas—(2 Reyes 19:21; Salmo 44:14). de perfecta hermosura, el gozo de … la tierra—(Salmo 48:2; Salmo 50:2). Los enemigos de los judíos citan sus mismas palabras con escarnio. Pe, פ.
16, 17. Tocante a la transposición de las letras hebreas (Pe y Ain) en el orden de los versículos, véase la Introducción. abrieron … su boca—como rapaces y rugientes fieras (Job 16:9; Salmo 22:13). De aquí que Jerusalén fuese tipo del Mesías. rechinaron los dientes—con vengativa malignidad. vímoslo—(Salmo 35:21). Ain, ע.
17. Jehová—Que no se regocije el enemigo como si fuese obra suya. Fué “Jehová”, que ha cumplido así sus amenazas proferidas por sus profetas, a causa de la culpa de Judea (Levítico 26:16; Deuteronomio 28:36, Deuteronomio 28:53; Jeremias 19:9). Tsadi, ץ.
18. muro—(v. 8). Personificado. “Su corazón”, es decir, de los judíos; mientras su corazón se eleva a Dios en oración, su discurso se dirige al “muro” (la parte puesta por toda la ciudad). echa lágrimas—(Jeremias 14:17). El muro es invitado a llorar su propia ruina y la de la ciudad. Véase una personificación semejante (cap. 1:4). niñas—las pupilas de los ojos (Salmo 17:8). Cof, ק.
19. da voces en la noche (Salmo 119:147). en el principio de las velas—esto es, la primera de las tres divisiones iguales (de cuatro horas cada una) en que los antiguos judíos dividían la noche, a saber, desde la puesta del sol hasta las diez. La segunda, llamada “la vela del medio” (Jueces 7:19), desde las diez hasta las dos de la mañana. La tercera, “la vela de la mañana”. desde las dos hasta la salida del sol (Éxodo 14:24; 1 Samuel 11:11). Después, bajo el dominio de los romanos, tuvieron cuatro velas (Mateo 14:25; Lucas 12:38). por la vida de tus pequeñitos—para que si Dios no quiere perdonarte a ti, preserve al menos a “tus tiernos hijos”. entradas de … las calles—(Isaías 51:20; Nahúm 3:10). Resh, ר.
20. comer las mujeres su fruto—según habían sido amenazadas (Levítico 26:29; Deuteronomio 28:53, Deuteronomio 28:57; Jeremias 19:9). los pequeñitos de sus crías—o más bien, “los niños que llevan en sus brazos” [Maurer]. Shin, שׁ.
21. (2 Crónicas 36:17). Tau, ת.
22. Has llamado, como a día de solemnidad … temores—Has convocado contra mí a mis enemigos de todas partes, tal como las multitudes solían reunirse en Jerusalén en las fiestas solemnes. El objeto con que respectivamente se reunían los enemigos y las multitudes (de Israel) formaban un triste contraste. Véase cap. 1:15: “llamó contra mi compañía”.