Isaías 9:6
6 Porque un niño nos es nacido, un hijo nos es dado, y el dominio estará sobre su hombro. Se llamará su nombre: Admirable Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
¿Por qué a Jesús se le llama “el Padre eterno” si Él es el Hijo de Dios?
PROBLEMA: La doctrina cristiana ortodoxa de la Trinidad sostiene que Dios es una Esencia en tres Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Sin embargo, Isaías 9:6 llama al Mesías “el Padre eterno”. ¿Cómo puede Jesús ser tanto el Padre como el Hijo?
SOLUCIÓN: Este versículo no es una fórmula trinitaria que llama a Jesucristo Padre. En realidad, es más fácil captar la idea cuando la frase se traduce literalmente al español, “Padre de la eternidad”. La primera parte del versículo seis hace referencia a la encarnación de Jesús. La parte que enumera los nombres por los que se le llama expresa su relación con su pueblo. Él es para nosotros el Admirable Consejero, el Dios Fuerte, el Padre de la Eternidad, el Príncipe de Paz.
Así considerado, vemos que Jesús es Aquel que nos da la vida eterna. Por Su muerte, sepultura y resurrección, Él ha sacado a la luz la vida y la inmortalidad. Verdaderamente, Él es el Padre de la eternidad para Su pueblo. El nombre “Padre de la eternidad” indica que, así como un padre amoroso provee para Sus hijos, Jesús nos ama y ha provisto para nosotros al darnos vida eterna.